Estas preciosas frutas, casi como gemas de rubí no solo son jugosas y dulces, sino que están repletas de nutrientes. Las fresas son una buena fuente de folato, potasio, manganeso, fibra y contienen incluso más vitamina C que las naranjas.
- El folato desempeña muchos papeles en el cuerpo, pero es especialmente importante para mantener nuestros cerebros sanos. Además, ayuda a proteger nuestras células del daño y también está involucrado en la señalización de las células dañadas para que nuestro sistema inmunológico pueda deshacerse de ellas. Este sistema ayuda a evitar que las células dañadas o cancerosas crezcan y se propaguen. Además, la ingesta adecuada de folato es absolutamente vital si está embarazada, ya que está involucrada en el desarrollo temprano del cerebro del feto que ocurre antes de que sepa que está embarazada. Por esta razón, gran parte de nuestros alimentos tienen folato agregado para garantizar que la mayoría de la población reciba las cantidades adecuadas en sus dietas.
- Las fresas también son una rica fuente de potasio. El potasio tiene muchas funciones importantes en el cuerpo, en particular, ayuda a nuestros cerebros a comunicarse con el resto de nuestros cuerpos a través de nuestro sistema nervioso y ayuda a mantener el equilibrio adecuado de líquidos.
- El manganeso es esencial para apoyar nuestros sistemas antioxidantes internos y juega un papel importante en el metabolismo.
- Una dieta rica en fibra ayuda a mantener nuestro sistema inmunológico sano y fuerte.
Las fresas también contienen un fitoquímico llamado ácido elágico, que en investigaciones recientes se ha sugerido que posee propiedades para combatir el cáncer. La investigación actual en estudios celulares está explorando el papel potencial que el ácido elágico podría desempeñar en la desaceleración del crecimiento tumoral. (En inglés)
Es importante tener en cuenta que estos efectos sobre las células cancerosas se han demostrado solo en estudios celulares y no se pueden aplicar a los seres humanos. Se debe hacer mucha más investigación antes de que estos resultados puedan informar nuestras recomendaciones dietéticas para los seres humanos. Sin embargo, es emocionante observar las investigaciones que se están realizando sobre las posibles propiedades anticancerígenas de las plantas, ya que nos recuerda la importancia de incluir una variedad de alimentos vegetales ricos en fitonutrientes en nuestra dieta para proporcionar la mejor protección contra el cáncer y otras enfermedades crónicas. ¡Las fresas son una forma deliciosa de agregar variedad de plantas y fitonutrientes a su dieta!
Consejos del chef
Aunque las fresas son más sabrosas cuando se compran en temporada, a fines de la primavera y principios del verano, están disponibles durante todo el año en la mayoría de los lugares. Al seleccionar fresas, asegúrese de que sean regordetas, firmes y de un rojo profundo y brillante por todas partes. Las fresas que son pálidas y verdosas se han recogido antes de madurar por completo, y no estarán a la altura de su máximo potencial de sabor. Cualquier parche azulado, suave y opaco es un indicador de que las fresas caducaron.
Si no es temporada, las fresas congeladas son un gran sustituto. Las frutas congeladas se recogen en su punto más maduro y se congelan rápidamente para conservar su sabor y perfil de nutrientes, lo que las convierte en una gran opción para tener a la mano siempre.
Las fresas son deliciosas por sí solas, pero también son una adición rica en nutrientes a muchos postres. Nuestra simple compota de fresa en microondas o nuestro postre favorito para la primavera, la compota de fresa y ruibarbo en microondas, son la cobertura perfecta para un yogur, un plato de avena o unos panquecitos.
Para una delicia clásica de verano, pruebe nuestras fresas con crema de vainilla. Y no lo olvide, las fresas congeladas son un excelente sustituto para las frescas, especialmente en recetas donde no se tienen que cocinar, como en nuestro delicioso helado casero.
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